Es normal beber en cenas, cumpleaños, comidas navideñas, etc. Somos un país de la UE que bebe con más frecuencia. Muchas personas no ponen un límite y se vuelven adictas. Una persona alcohólica no puede controlar su consumo de alcohol, y en los casos en los que intenta dejar de beber muestra síntomas de abstinencia. El alcoholismo es una enfermedad degenerativa que está asociado a muchos problemas de salud, como enfermedad cardiovascular, hipertensión arterial, problemas digestivos, etc.
En 2016 el consumo per cápita en España alcanza los 10 litros de alcohol puro al año por persona en mayores de 15 años. Las adicciones siguen siendo un problema en España, ya que el consumo suele iniciarse alrededor de los 13,7 años. Las bebidas etílicas se pueden encontrar con facilidad en quioscos o tiendas a partir de los 18 años. Los jóvenes no ven el consumo de alcohol como un problema, porque algunos estudiantes reconocen haber tenido alguna vez una intoxicación etílica o borrachera por alcohol.
Desde 20minutos explican que «son muchos los factores asociados al consumo excesivo de alcohol en jóvenes (biológicos, de personalidad…), pero la influencia de la gente de la misma edad durante esta etapa es, sin duda, uno de los más decisivos.» El consumo precoz de alcohol puede dañar el corazón y el hígado, causando arritmias, hígado graso, fibrosis y cirrosis. El alcohol puede causa una mayor adicción en la adolescencia.
Por eso, los padres no deben consumir alcohol con frecuencia delante de sus hijos, por lo que es importante informar al adolescente que el alcoholismo es una enfermedad que está asociado a muchos problemas de salud. El alcohol puede provocar enfermedad hepática, hipertensión arterial, enfermedad cardiovascular, problemas digestivos, cáncer de mama, depresión, problemas en el hígado, estrés, baja autoestima, etc.
El psiquiatra José A. Hernández Hernández, especialista en adicciones, nos explican que la prevención de esta enfermedad debe empezar desde la adolescencia y nunca deben consumir antes de los 18 años.
¿El alcohol afecta más a las mujeres que a los hombres?
Las tasas de consumo ha aumentado en las mujeres y adolescentes. La proporción de niñas menores de 15 años que beben ha pasado del 26% al 41% durante la década de 2000. Un estudio ha descubierto que la mujeres recurren al alcohol porque han sufrido violencia física, por diversión o porque están estresadas. Pero el alcohol afecta más a las mujeres que a los hombres, porque las mujeres que beben más de una bebida alcohólica al día, tienen más probabilidades de desarrollar una enfermedad coronaria.
Esto puede ocurrir por las diferencias en el organismo, ellas tienen menos masa corporal y más grasa corporal. El cuerpo femenino tiene un 55% de agua en los tejidos y el cuerpo masculino un 60%, lo que conduce a una absorción más rápida y a niveles más altos de alcohol en la sangre. La toxina se disuelve antes en agua que en grasa, por eso es más lenta la desaparición de la intoxicación por alcohol.
El consumo de alcohol entre las mujeres está aumentando porque el número de hospitalizaciones ha aumentado más entre ellas que entre los hombres. Muchas mujeres recurren al alcohol porque están estresadas y usan el alcohol como un remedio contra el estrés y la ansiedad. Las mujeres que están embarazadas no pueden beber alcohol, porque la exposición prenatal al alcohol puede aumentar el riesgo de parto prematuro y hacer que los bebés presenten problemas físicos, cognitivos y de comportamiento.
¿Cuál es el tratamiento?
Una persona es alcohólica cuando no es capaz de evitar beber, o tiene la necesidad de beber cada vez mayores cantidades de alcohol. Para dejar esta adicción es aconsejable acudir a centros especiales con profesionales de la medicina y la psicología. Es fundamental pedir ayuda y reconocer la adicción y los síntomas, para iniciar el tratamiento. Los síntomas de la adicción al alcohol son: pérdida del control, incapacidad para parar de beber, fiebre cuando se deja de tomarlo, necesidad de beber cada vez mayores cantidades de alcohol, etc.
Se puede combatir esta adicción con la ayuda de un personal médico adecuado, esfuerzo, el apoyo de la familia y una serie de terapias. Para el diagnóstico, el especialista realizará una historia clínica completa y la aplicación de intervenciones psicoterapéuticas y farmacológicas. Con un tratamiento adecuado puede recuperarse. Es importante elegir un especialista con experiencia en adicciones y que se haya especializado en esta enfermedad.
La correcta elección de un especialista puede ser decisiva para superar esta enfermedad y recibir el tratamiento adecuado. El psicólogo ofrece un trato totalmente personalizado para poder elegir el diagnóstico más adecuado, ya que cada paciente tiene necesidades diferentes. Para tratar el síndrome de abstinencia, puede ser necesario el ingreso hospitalario, y la ayuda y colaboración de los familiares.