Es importante contar con expertos especializados en la revisión de los estados financieros de las empresas porque todos los negocios deben registrar sus operaciones financieras. Pero no todas las empresas cumplen con las normativas establecidas en las leyes, y no apuestan por las auditorías contables. Desde Diario Jurídico explican que «solo el 1,84% de las empresas españolas audita sus cuentas». Si las empresas no realizan estas auditorías no pueden conocer la contabilidad del negocio ni tener una visión clara de la situación financiera.
Es importante hacer auditorías contables cada cierto tiempo para que las entidades cumplan con las normas y regulaciones aplicables. Una auditoría es un proceso de revisión exhaustiva de los registros contables y financieros, por lo que la empresa puede conocer el registro y control de todas las entradas y salidas de dinero que se ha realizado en el año.
Para hacer esas revisiones contables se necesita auditores imparciales y que proporcionen una opinión independiente de los estados financieros del negocio. Estos expertos pueden evaluar los registros contables y financieros, y realizar trabajos muy precisos y apegados a la ley.
Los especialistas en auditoría y consultoría a entidades públicas y privadas de la empresa Crowe LLP nos explican que los auditores se encargan de analizar las cuentas anuales de la empresa, los informes de gestión trimestral sobre el estado de las cuentas, las facturas emitidas y recibidas, las cuentas del negocio, las obligaciones tributarias de la empresa y los libros de cuentas en el Registro Mercantil.
El auditor debe involucrarse con la empresa y explicar cómo se encuentra la situación económica de la empresa. Pero también debe ofrecer un asesoramiento contable personalizado. Las grandes empresas privadas que tengan un alto volumen de transacciones financieras y una gran cantidad de activos y pasivos, deben apostar por estas revisiones contables. También es importante realizar auditorías cuando la empresa cotiza en bolsa, emplea a más de 50 personas durante un año completo, y tiene un volumen financiero superior a 5 millones de euros.
Los expertos explica que si la empresa cotiza en bolsa debe informar a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) sobre sus movimientos económicos. Las organizaciones sin ánimo de lucro también optan por las auditorías porque deben demostrar cómo utilizan los fondos públicos que reciben y cumplir los requisitos legales. Con estas revisiones financieras pueden demostrar transparencia ante sus donantes y garantizar que los fondos se utilizan de manera adecuada.
¿Cuáles son los beneficios de la auditoría?
Los beneficios de la auditoría son:
–Muestra el balance de los ingresos: si el auditor realiza una auditoría bien estructurada, puede mostrar de manera clara el balance de los ingresos del negocio.
–Mejora la previsión: otro de los beneficios es que con la auditoría, la empresa puede mejorar la previsión de compras y pagos.
–Conoce los movimientos económicos: al analizar las operaciones financieras, el auditor puede conocer los movimientos económicos de la empresa, el balance general y el estado de flujo de efectivo.
–Mejora la gestión financiera: este experto puede ayudar a la empresa a mejorar su gestión financiera porque analiza cuentas anuales, informes financieros, emisiones de valores y salidas a bolsa.
–Cumple con las normas: los auditores comprueban que la empresa cumple con las normas y regulaciones aplicables. Esta figura se encarga de realizar informes de auditoría anuales y ajustados a la ley.
–Fortalece la confianza de los mercados financieros: la auditoría contribuye a fortalecer la confianza en los mercados financieros e identifica las oportunidades de mejora.
–Buena estabilidad: el auditor comprueba que la empresa mantenga una buena estabilidad, independientemente de su volumen de actividades comerciales.
–Asesoramiento contable: si la empresa cuenta con un asesoramiento contable personalizado por parte del auditor, puede hacer frente a inversiones, y estará siempre al día de las obligaciones contables.
–Revisión imparcial: el auditor es imparcial y ayuda a identificar posibles errores o irregularidades en los registros financieros de la empresa. Esto le permite identificar puntos débiles y mejorar el funcionamiento, por lo que ayuda a determinar que se hace bien y que no.
–Visión objetiva del negocio: con la ayuda de un auditor, el empresario estará mejor informado de los requisitos contables aplicables a sus negocios, y al tener una visión objetiva del negocio se pueden tomar decisiones más acertadas.
–Atrae más inversores: los informes auditados presentan resultados objetivos, y cuando una empresa presenta a sus socios esos informes se crea un ambiente de confianza que ayuda a atraer más inversores.
¡Ya sabemos que es importante que las empresas realicen informes de auditoría anuales ajustados a la ley, para conocer los movimientos económicos y mostrar el balance de sus ingresos!


