¿Qué es la carga aérea?

Puede ser que alguna vez la hayas escuchado o no te suene de nada. La carga aérea es un servicio que hace referencia al transporte de mercancías por avión. La carga se transporta en la bodega y accede a ella por una vía diferente al equipaje de los pasajeros. Veamos un poco en qué consiste.

Una vez contratado el servicio, las mercancías se guardan en el almacén del aeropuerto hasta que se determina su alojamiento dentro del avión. Tanto en su llegada como en su salida del país, pasa por un control aduanero dentro de la zona de carga del aeropuerto.

Según el portal de información Interempresas en los aeropuertos españoles

mueven poco más de 1 millón de toneladas en mercancías al año. Esto incluye tanto el tráfico nacional como el internacional. El transporte aéreo es el transporte más rápido y uno de los más seguros.

De la gestión de los envíos no se encargan las aerolíneas, sino unas empresas de transporte llamadas “Operadores de Carga”, con oficinas dentro del área de carga del aeropuerto. Hasta su mostrador se pueden dirigir tanto empresas como particulares para entregar o recoger portes que desean transportar enviar por avión.

El operador de carga alquila un espacio en la bodega de un vuelo y se encarga de gestionar todos los trámites necesarios para el envío y recogida de la mercancía. Esta empresa de transporte es la responsable de que el porte llegue a su destino.

José Marín, responsable de una empresa de importación-exportación de textil, que abastece a comercios, nos dice haber contratado varios servicios de carga aérea con Star Cargo, una empresa de transporte nacional e internacional con sede en el aeropuerto de Barajas. Con estas operaciones Marín lograba subsanar los envíos más urgentes.

Conozcamos un poco más cómo funciona la carga aérea.

Cómo se efectúa la carga aérea.

El transporte de mercancías por avión tiene ciertos pasos que los diferencia de otros tipos de transporte. Así es como se lleva a cabo:

1. Reserva de espacio: El proceso comienza con la reserva de espacio en un secador de carga. Esto implica determinar la cantidad de mercancía que se enviará y acordar un espacio en un vuelo concreto. Las tarifas varían según el tamaño, peso y destino de la carga.
2. Embalaje y etiquetado: La mercancía debe estar debidamente embalada para un transporte seguro. Es importante cumplir con las regulaciones de la aerolínea y las normativas de seguridad. Cada paquete debe estar etiquetado claramente con información como el origen, destino y contenido.
3. Documentación: La documentación es imprescindible. Si no está en regla, la carga no viajará en el avión. Se deben preparar documentos como la factura comercial, lista de empaques, y la carta de porte aérea Air Waybill  (AWB en inglés). En este documento se detallan datos como la naturaleza de la mercancía, su peso y tamaño, la empresa de transporte, su origen y su destino.
4. Control de seguridad: Antes de cargar la mercancía en el avión, se somete a controles de seguridad. Esto incluye la inspección de los paquetes para asegurarse de que no contengan elementos prohibidos o peligrosos.
5. Proceso de carga: La carga aérea se almacena en instalaciones de carga en el aeropuerto. Se utiliza equipo especializado, como contenedores aéreos o paletas, para organizar la mercancía en la bodega de manera eficiente.
6. Aduanas y seguridad: Antes de la salida, la mercancía debe pasar por un proceso de aduanas. Los funcionarios de aduanas inspeccionan y verifican la documentación para asegurarse de que se cumplen todas las regulaciones y restricciones. Esto es especialmente importante en el caso de envíos internacionales.

Beneficios e inconvenientes de la cara aérea.

La empresa de logística Depha Group publicó en LinkedIn un interesante artículo en el que habla de los beneficios de la carga aérea. Estas son las 4 ventajas principales que señala la compañía:

• Un transporte rápido y eficiente. Los envíos por avión permiten recorrer grandes distancias en unas pocas horas. Es una solución efectiva para las entregas urgentes y para las mercancías que necesitan llegar a su destino en una fecha determinada. Para que nos hagamos una idea, un envío por barco desde Barcelona hasta Nueva York tardaría unos 12 días, a lo que hay que añadir, que el buque zarpa una vez a la semana, por lo que es posible que se demorara unos días más. Sin embargo, si el envío lo efectuamos por avión, el vuelo tarda unas pocas horas y el envío está disponible al día siguiente.
• Acceso a zonas remotas. El transporte por avión consigue llegar a zonas de difícil acceso evitando obstáculos complicados que tendríamos que salvar si utilizáramos otros medios de transporte. Por ejemplo, se pueden llevar mercancías al interior de China sin necesidad de hacer un largo recorrido por mar y atravesar parte del continente asiático.
• Flexibilidad de horarios. La frecuencia de los vuelos permite que las mercancías viajen a distintas horas del día y de la noche, lo que facilita la programación de los transportes por parte de las empresas.
• Reducción del tiempo de transporte. Esto hace referencia a que se disminuye considerablemente el tiempo que la mercancía viaja hasta llegar a su destino. Es especialmente importante en el caso de envíos de productos tecnológicos, ya que con la carga aérea se reduce la posibilidad de sufrir daño durante el viaje y en el transporte de productos perecederos como los medicamentos.

No todo en el transporte aéreo son ventajas. También entraña una serie de inconvenientes respecto a otros medios de transporte, lo cual es necesario evaluar para saber si la carga aérea es la opción más adecuada. Estos inconvenientes son:

• Costes elevados: El transporte aéreo es significativamente más caro por kilogramo o volumen que otros medios de transporte, como el marítimo o el terrestre. Esto puede ser una limitación para mercancías voluminosas o de bajo valor.
• Capacidad limitada: Los aviones tienen una capacidad limitada de carga, lo que dificulta el transporte de grandes cantidades de mercancía a la vez. Esto puede generar cuellos de botella en períodos de alta demanda.
• Limitaciones de peso y volumen: Las aerolíneas imponen restricciones de peso y volumen a las mercancías que se pueden transportar. Cargas pesadas o voluminosas pueden requerir costosas tarifas adicionales.
• Demoras en trámites aduaneros: Aunque el transporte aéreo es rápido, los procesos de aduanas y seguridad en los aeropuertos pueden generar demoras, especialmente en envíos internacionales.
• Impacto ambiental: El transporte aéreo genera una cantidad significativa de emisiones de carbono en comparación con otros medios de transporte, lo que lo convierte en una opción menos sostenible.

Todo no se puede transportar en un avión.

Al igual que sucede con los equipajes de los pasajeros, determinados productos no se pueden transportar en la bodega de un avión. Esto se debe a la propia naturaleza del transporte. Productos inflamables o que no aguantan la presión que alcanza el avión en pleno vuelo ponen en peligro la seguridad de la aeronave. Estas son algunas mercancías que no se pueden transportar por carga aérea:

1.  Materias explosivas: Cualquier tipo de explosivo, como fuegos artificiales, dinamita o munición, generalmente está prohibido.
2. Gases inflamables: Gases comprimidos o licuados que son inflamables, como propano y butano.
3. Materiales tóxicos y venenosos: Sustancias químicas venenosas, como cianuro y otras sustancias químicas altamente tóxicas, no se permiten.
4. Materias infecciosas: Sustancias biológicas peligrosas que pueden causar enfermedades, como agentes patógenos, están restringidas.
5. Materiales radioactivos: Sustancias radioactivas, como isótopos radiactivos, no se permiten a menos que se cumplan requisitos especiales y se obtengan los permisos necesarios.
6. Sustancias corrosivas: Productos químicos altamente corrosivos, como ácido sulfúrico o hidróxido de sodio, generalmente están restringidos.
7. Materias magnéticas: Mercancías con fuertes campos magnéticos, como imanes potentes, pueden afectar la navegación y los sistemas electrónicos del avión.
8. Mercancías perecederas no refrigeradas: Algunos productos perecederos, como alimentos, pueden no ser aptos para el transporte aéreo si no se pueden mantener a la temperatura adecuada durante el vuelo.
9. Animales vivos: Aunque existe una normativa específica respecto al transporte de mascotas, el transporte de animales vivos, especialmente de especies salvajes, puede estar restringido debido a consideraciones de bienestar animal.

Al contratar un servicio de carga aérea debemos ser cuidadosos con su planificación previa. Esto incluye seleccionar la ruta adecuada, calcular los costes asociados y reservar el servicio con antelación. Debemos partir de que aunque el agente de carga aérea gestiona el envío, nosotros debemos facilitarle la mercancía perfectamente embalada.

La documentación es una parte crucial del proceso. Debemos facilitarle a la empresa de transporte toda la documentación que nos solicite a fin de que se pueda efectuar el envío sin demoras innecesarias o sin que pueda terminar retenido en alguna aduana

El seguimiento y rastreo del envío es esencial para mantener el control durante todo el proceso. Utiliza las herramientas de seguimiento que pone a disposición la compañía aérea y la empresa de transporte para conocer donde se encuentra tu mercancía en cada momento.

El transporte de mercancías por avión a través de la carga aérea es un avance importante en el desarrollo de la logística internacional.