Externalizar servicios en las empresas es una práctica cada vez más habitual. Uno de esos servicios que más tiempo llevan siendo externos, es el de limpieza. Hace ya unos cuantos años, las empresas de limpieza cobraron protagonismo y se convirtieron en uno de esos servicios indispensables de los que toda empresa hace uso. Antes de esto, las empresas solían contar o disponer con su propio servicio de personal cualificado.
A parte de este tipo de servicios, es fácil encontrarse con consultorías, asesorías especializadas, servicios de mantenimiento para las instalaciones, etc. Lo importante es minimizar gastos y por lo que se ve, contratar este tipo de servicios fuera de la empresa, resulta mucho más económico para la misma que contratar su propia plantilla. De cualquier modo, la creación de empleo siempre es bienvenida y si para ello hay que contratar servicios externos, bien por las empresas.
Con este boom de la externalización, han proliferado empresas especializadas que, aun siendo conocidas estaban limitadas a un sector concreto, como puede ser el caso de las lavanderías industriales. Empresas como Clat Gestión de Ropa Laboral han sabido sacar partido a esta coyuntura y ofrecen todo tipo de servicios relacionados con la lavandería industrial y el renting de uniformes, otro de los servicios más demandados en la actualidad. En que consiste este tipo de servicio integral, es precisamente de lo que vamos a hablar en este artículo.
Dado que para muchas empresas de diversos sectores, las ventajas de contar con un servicio externo de lavandería y gestión de la ropa (uniformes, lencería, mantelerías, etc.) es una solución más que apropiada, son muchos los hoteles, restaurantes, empresas constructoras o centros de salud, que cuentan con ellas para mantener su ropa en perfecto estado. Mientras que antes era necesario disponer de una infraestructura, por ejemplo, en un centro hospitalario, para que se ocupase de lavar toda la ropa, lencería y textil del centro, ahora puede destinarse ese espacio a otras cuestiones y dejar el trabajo en manos de profesionales externos.
Un buen servicio al servicio de la empresa
Una lavandería industrial, ofrece básicamente el mismo servicio que una lavandería de a pie. Su labor consiste en recibir ropa o textiles, limpiarlos utilizando detergentes, jabones, desinfectantes y suavizantes, mediante el uso de maquinaria específica para este fin. El personal que se encarga de estas tareas, cuenta con la capacitación específica para utilizar los productos adecuados en combinación con la maquinaría adecuada.
La mayor diferencia existente entre las lavanderías industriales y las normales, reside en el volumen de ropa o textiles con los que trabajan. Sobre todo, cuando se trata de empresas y negocios que utilizan una elevada cantidad de prendas en sus instalaciones. Razón por la cual, son la alternativa más demandada por restaurantes, negocios de hostelería en general, centros de estética o salud, etc.
En cuanto a sus instalaciones, se trata de unas naves o locales amplios, con una gran variedad de secadoras y lavadoras de diferentes capacidades. Así mismo, cuentan con otro tipo de equipos que permiten garantizar una limpieza, rápida, eficaz y eficiente. Aunque muchas empresas o instituciones de salud, cuentan con su propio servicio de lavandería, debido a que generan un gran volumen de lencería y prendas para lavar, esto implica la necesidad de disponer de un amplio espacio físico, equipos adecuados y personal solo para este servicio. A su vez, esto conlleva un coste en insumos de limpieza y personal, añadir los costes de mantenimiento de los equipos y los gastos extra en agua y electricidad.
Cuando estos centros que disponen de su propia lavandería, echan cuentas y calculan los costes asociados a la misma, descubren que contratar un servicio externo, puede tener grandes ventajas. Siendo de esta manera, no es de extrañar que cada vez sea más frecuente que las diferentes entidades confíen esta labor de mantenimiento de ropa y textil, a profesionales del sector. Aunque pueda parecer lo contrario, se trata de personal que posee conocimientos y formación específica para acondicionar la ropa de los trabajadores en función del sector de procedencia, de si requiere algún tratamiento específico o no.
Cada vez son más las empresas que se ocupan de esta labor, cuentan con gran experiencia y poseen una sólida visión del sector. Es fácil encontrar la lavandería industrial más acorde con las necesidades y que estas, cuenten con la capacidad necesaria para acometer todo tipo de encargos: desde los más sencillos y livianos, hasta los más pesados que requieren la aplicación de productos específicos para lograr unos resultados excelentes.
En el caso de que tengas una empresa con necesidades de lavandería y todavía no te hayas convencido, sigue leyendo. A continuación vamos a revelar cuales son las ventajas más notables que puede obtener una empresa si dispone de un servicio externo de lavandería industrial.
Soluciones ventajosas para todos
Como venimos diciendo, disponer de una lavandería en una empresa, conlleva una serie de gastos asociados que no se pueden eludir. Los costes de la infraestructura, el consumo de suministros como el agua o la electricidad, los insumos, el personal cualificado para trabajar en ella, etc. Con toda esta lista, no es de extrañar que una de las principales ventajas que ofrece un servicio de lavandería industrial externo, sea el ahorro de recursos y tiempo. Al carecer de la necesidad de disponer de un espacio en el que almacenar y acondicionar los uniformes de trabajo o prendas necesarias, es posible disponer de ese espacio para otra finalidad. Tampoco hay que llevar un registro exhaustivo de las unidades, las tallas, reposición, etc. por lo que no es necesario contar con un departamento encargado de gestionar esta parte concreta de la empresa, pero a la vez, ajena a su labor real. Inevitablemente, supone un ahorro por igual, en contrataciones.
Otra de las grandes ventajas que proporciona un servicio de lavandería industrial, son los resultados. Se obtiene una limpieza de mayor calidad, puesto que los profesionales del sector, conocen los pormenores y necesidades de todos los sectores con los que trabajan y las actividades que en ellos se realizan. Así como conocen la normativa al respecto que, en según que casos, es bastante rigurosa. Una lavandería industrial, garantiza que sus servicios de limpieza se ajustan a la ley.
Por norma general, las empresas de lavandería industrial, son muy flexibles, lo que constituye otra gran ventaja. En la mayoría de ellas, disponen de un servicio de recogida y entrega en la misma empresa. Sin que exista la necesidad de que un empleado, deba encargarse de esta misión y llevarla a las instalaciones. La propia lavandería, recoge la ropa en la empresa en el momento que mejor venga, adaptándose totalmente a sus necesidades. Lo único que tiene que hacer la empresa es decidir el momento y comunicarlo a la lavandería.
Disponen de todo tipo de tratamientos especiales. En algunas empresas, los uniformes, requieren tratamientos especiales, debido a la actividad que desempeñan. Bien puede tratarse de desinfecciones o limpiezas profundas debido al tipo de manchas que se producen en los uniformes. Como fuere, las empresas, cuentan con los conocimientos y productos adecuados para acondicionarla como es debido.
Uno de los factores más relevantes aunque no se le de extrema importancia, es la contribución con el medio ambiente. Se genera un menor impacto medioambiental, puesto que al disponer de la maquinaria de alto rendimiento y calidad, necesaria para este fin, la limpieza se realizad de una forma eficiente y eficaz. Esto hace posible que se ahorre en luz, agua, detergente… además de que la mayoría utilizan productos ecológicos y sostenibles en gran medida, lo que supone una gran noticia para nuestro planeta.
Aún nos queda alguna ventaja más. Un servicio de lavandería industrial, permite conocer el estado de cada una de las prendas que pasan por sus manos. En la mayoría de las empresas del sector, se realiza un informe de seguimiento de cada una de las prendas que le son entregadas. De esta manera, el cliente, puede saber a ciencia cierta el estado en que llegó la prenda, los procesos de limpieza a los que se somete, el resultado del tratamiento, la necesidad de arreglo, etc. Toda esta información, permite realizar una gestión adecuada del stock y hacer una previsión de cuándo será necesario adquirir nuevas prendas para la empresa.
Por último, cabe señalar que las empresas que cuentan con este servicio, pueden beneficiarse de otro tipo de servicios complementarios. Entre ellos, podemos destacar la posibilidad de llevar a cabo pequeñas intervenciones en los uniformes, sean de adaptación o restauración. Esto supone prolongar la vida útil de cada prenda y evitar sobre costes innecesarios. También es posible contratar un servicio de leasing de ropa laboral que consiste en una solución bastante interesante, similar a la que se utiliza con los coches de empresa.
En resumen, las lavanderías industriales amplían su cartera de servicios, ofrecen comodidad, fiabilidad y otras ventajas a las empresas, por lo que son cada vez más eficientes y demandadas. Solo en casos muy concretos, sale más a cuenta, disponer de un servicio de lavandería en las mismas instalaciones en las que se requiere. Salvo estas excepciones, la mejor opción es acudir a los profesionales del sector y que la ropa este siempre, a punto.