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La especialización, la mejor opción para una empresa: ejemplo práctico

Cuando tengo que analizar un tema siempre hago lo mismo. Me pongo en la piel de mi abuela, una de las personas más sabías que he conocido y que creo que ya no conoceré alguien igual. Mi abuela siempre tenía dichos para todo. Y en este caso, cuando decía “quien mucho abarca, poco aprieta”, era totalmente cierto.

En este caso, como aseguran desde el Centro Virtual Cervantes, es una expresión que alude a quien, al tratar de emprender varias cosas a un tiempo, no desempeña bien ninguna. También se aplica a la capacidad intelectual que, por estar dispersa en varios asuntos a la vez, no rinde como debiera y no avanza en ninguno. Pues es un dicho que se puede aplicar al mundo empresarial.

¿Por qué? Pues porque en muchas ocasiones las empresas pecan de ambición. Claro que está bien apostar por ello, pero muchas veces hay que hacerlo con cabeza. Ambición sí, pero con cautela. Porque así vemos que grandes empresas que han mirado muy alto, han acabado cayendo. Y para estas cosas se creó la especialización.

Os voy a poner en situación para que podáis entenderlo. Acudes a un restaurante y te sacan una carta con 20 páginas. Tienen de todo, pero cuando digo de todo, es de tener hasta ostras, productos japoneses o alimentos de todas las temporadas. ¿Qué piensas? Pues está claro que es imposible que pueda hacer de todo y que todos los productos estén en buen estado.

Por el contrario, si vas a un restaurante en el que sabes que su menú es cerrado y de temporada. Pues tienes claro que será todo lo contrario. Pues así ocurre con las empresas que decidan especializarse. Y hoy os vamos a poner un ejemplo de cómo hacer bien esto.

Aprovechar las fortalezas

Para hablar de Semarp hay que echar la vista atrás más de 20 años. En esa España que arrancaba el siglo XXI con muchas esperanzas, con ganas y con un mundo empresarial que tenía que subirse al tren de las nuevas tecnologías.

Pues bien, esta empresa lo que hizo fue aprovechar su gran experiencia adquirida trabajando el metal, en concreto el acero inoxidable, para ofrecer un producto de gran calidad para soluciones reales a empresas alimentarias, agroalimentarias, farmacéuticas, químicas o medioambientales entre otras.

¿Qué hizo? Pues poner todo su empeño en ofrecer al cliente un trato especializado y cuidando todos los detalles. Y así es cómo se convirtió en una empresa especializada en la fabricación de sistemas de extracción, aportando solución a las necesidades de obtención de muestras y análisis representativos de todo tipo de productos en polvo, granulado o líquido.

Y la verdad es que echar un vistazo a su catálogo es algo que merece la pena. Esa especialización permite tener artículos tan concretos como es un muestreador de polvo. ¿Qué es eso? Pues sirve para el análisis de producto en polvo o grano pequeño, con diferentes puntas para distintos volúmenes utilizables en el mismo cuerpo del muestreador para polvo y de fácil desmonte para su limpieza.

También puedes encontrar en la web de Semarp, un muestreador de carne. En este caso sirve para la obtención de cortes circulares de 25mm, ya sea para muestras bacteriológicas o histología de superficies de carnes u otros alimentos. Además está fabricado en acero inoxidable.

Los beneficios

Ya has visto cómo al especializarse en un sector específico, la empresa adquiere un conocimiento profundo del mercado, lo que le permite identificar oportunidades de negocio, entender las tendencias del mercado y anticipar los cambios en la industria. Sin duda, una mirada adelantada.

Además, y como has visto en el ejemplo que te hemos puesto, la especialización puede ayudar a diferenciar a la empresa de la competencia, creando una ventaja competitiva que le permite destacarse en el mercado y atraer a clientes potenciales. Lo que vas a ver es que la empresa puede optimizar sus recursos y maximizar su rentabilidad, ya que al conocer a fondo el mercado puede identificar oportunidades de crecimiento y potenciar sus ventas.

Con todo esto, al centrarse en un sector específico y concreto, la empresa puede optimizar sus procesos, algo que es tan importante en los tiempos que corren. Y así mejorar la calidad de sus productos o servicios y ofrecer soluciones más adecuadas a las necesidades de sus clientes.

La especialización en un sector específico puede ser beneficiosa para una empresa al permitirle adquirir un conocimiento profundo del mercado, mejorar su eficiencia operativa, crear una ventaja competitiva, fidelizar a los clientes y aumentar su rentabilidad.

 

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